Los océanos hoy en día se encuentran en un estado de contaminación muy deplorable. Lo peor no es sólo el nivel de contaminación en la que se encuentran sino la posición de estos gobiernos con respecto a esta situación.
Debido a que el planeta Tierra está conformado mayormente por agua, el ser humano no le ha prestado atención suficiente al problema de la polución, dando como resultado que el aire, los suelos y los mares se sigan contaminando casi irremediablemente.
Sin embargo, no todos tenemos ese grado de consciencia. Un grupo de jóvenes de Sudán inventaron un robot que es capaz de recoger hasta 8.3 billones de toneladas de basura y plástico de los mares.
Esto es igual a 8.3 mil millones de toneladas de plástico. El equipo dio a conocer su invento en un evento celebrado en Dubai llamado Primer Desafío Global, en el cual jóvenes como estos de Sudán muestran sus inventos enfocados en la sostenibilidad y cuidado del medio ambiente.
Lo que más impresiona de este invento son cuatro cosas en particular, y son las siguientes:
- Es un robot: es un robot construido en un país de tercer mundo que tiene uno de los niveles de pobreza más altos. El costo de un robot con tales capacidades puede tener un costo de hasta 500 millones de dólares. Es prácticamente el primer robot construido en ese país a favor de la sostenibilidad y que es ecológico. Además, es una máquina que opera en el mar, no en tierra firme. Sudán es un país costeño que tiene un espacio marítimo lo suficientemente grande como para probar este robot.
- El dinero: Sudán es uno de los países más pobres del mundo a pesar de que el 98% de su PIB proviene del petróleo. Además, también es un país que se dedica a la ganadería. Construir un robot que haga un trabajo tan memorable requiere de un gran esfuerzo y trabajo. El dinero siempre va a ser un problema en Sudán. Por lo que construir un robot con presupuesto limitado puede costar mucho. No obstante, lo lograron.
- Son 4 jóvenes: no estuvo a cargo una corporación o un sistema de este proyecto de robótica, sino de 4 adolescentes que creyeron que podían lograrlo. Si todo marcha bien, dicho proyecto será usado por otras corporaciones para recoger el plástico de los océanos.
- Es muy útil: considerando que más de 300 millones de plástico llegan a parar a los mares desde cualquier parte del mundo, este invento resulta ser muy útil. Por otra parte, la situación geográfica de los chicos puede hacer que ganen mucho más dinero. La situación económica de Sudan es la 2da peor del mundo detrás de Burundi. Esta máquina pareciera sonar como una solución bastante sostenible, que ayudaría en la parte económica.
Otras funciones
Resulta que este robot no sólo está diseñado para limpiar el plástico sino también otros desechos tóxicos.
Es decir, tiene doble funcionalidad. El proyecto primeramente se dio a conocer en portales africanos como Face2Face Africa, y luego en otros sitios web fuera de África.
Además, estos robots son unas de las pocas opciones con las que podría contar Sudán para limpiar los desechos tóxicos de sus aguas, principalmente aquellos producidos por el petróleo.
El robot no ha sido probado para recoger deshechos que no son sólidos, pero será mejorado para garantizar este trabajo igualmente.
Desafío Global
Desafío Global es un concurso celebrado por primera vez en los Emiratos Árabes, el cual tiene como objetivo reunir jóvenes de todo el mundo que puedan contribuir con sus ideas ecológicas.
Dubai le abre las puertas a cualquier país para que participen.
El concurso se muestra como un desafío gigantesco a aquellos que sueñan con un mundo mejor y sostenible.
En este caso, asumieron el reto 4 jóvenes junto con otros más, quienes con mucho esfuerzo, lograron construir una máquina capaz de recoger millones de toneladas de plástico.
Es importante recalcar que el diseño consta de varios robots, no solo de uno solo.
El invento podría ayudar con la recolección de 8 mil millones de toneladas de plástico que llegan desde los ríos hasta los océanos.
Una investigación arrojó que, en efecto, de seguir así las cosas, habrá más de 8.3 billones de toneladas de plástico en el océano para el 2050. Y esto sin contar factores como la sobrepoblación.
La función de estos robots en general sería la siguiente:
- Ayudar a la vida marina que es la más afectada. Muchos desechos tóxicos que son arrojados al océano están acabando con toda clase de vida marina y de especies como tiburones, ballenas, focas, leones marinos, pulpos, peces de todo tipo, entre otro. Recordemos que el plástico es un material que no es biodegradable, sino que puede perdurar casi que por toda una eternidad. Los animales se ven afectados ya que el plástico los ahoga, los hiere, les destruye el hábitat en el que se desenvuelven. La vida marina de Sudan y de los alrededores de Dubai es única y atrae mucho turismo, por lo que no sería conveniente un empeoramiento de este escenario. Uno de las especies más afectadas son los delfines que habitan estas regiones.
- Limpieza de los ríos: no pareciera un invento para ser usado en los ríos, pero en realidad sí lo es. El río más largo del mundo, el río Nilo es uno de los más contaminados. De hecho, hay una estadística que indica que el 90% de los desperdicios que sucumben en el Nilo llegan al océano, destruyendo el hábitat de muchas especies. Este robot sería usado primeramente allí, en el río Nilo, el cual arrastra una gran cantidad de basura y desechos plásticos.
- Limpieza de los océanos: según un reporte, los océanos en esta región del mundo se empezarían a limpiar desde los ríos. Se demostró que este invento es efectivo en estos lugares.
Lo malo
No hay detalles de cómo funciona este robot diseñado y construido por estos 4 adolescentes sudaneses.
Muy probablemente sea usado de manera exclusiva en el Nilo para facilitar el trabajo de limpieza pero por ahora, no se han revelado más detalles sobre cómo funciona por cuestiones comerciales.
Alberto Fuentes es redactor de equipos de limpieza en mejorrobotaspirador.net. Es redactor y editor freelance, y su trabajo se ha publicado en Condé Nast Traveler, The Guardian, GQ, The New York Times y Wired, entre otros. Alberto estudió periodismo en la Universidad Católica Andrés Bello de Santiago de Chile y habla con fluidez inglés, español y francés.